Energía fotovoltaica en Las Palmas
Adentrándonos más en la energía fotovoltaica en Las Palmas como tipo de energía, podemos asegurar que se trata de una fuente energética que convierte la luz solar en electricidad. Esto se realiza a través de la tecnología, más concretamente, a través del efecto fotoeléctrico.
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Características principales de la energía fotovoltaica en Las Palmas
Sus características principales son tres:
- Renovable
- Inagotable
- No contaminante
Este tipo de energía puede ser utilizada a través de generadores de pequeño tamaño para el autoconsumo o en grandes plantas fotovoltaicas para usos industriales o en masa.
Su funcionamiento es simple: absorbe la energía solar a través de un proceso denominado fotoeléctrico. Utiliza los fotones (partículas de luz) que es capaz de retener y libera a su vez electrones, responsables de crear la energía eléctrica.
Para conseguir este resultado, se emplean celdas o bien células fotovoltaicas, las cuales están compuestas de los siguientes materiales:
- Silicio monocristalino
- Silicio policristalino
- Silicio amorfo
Características principales de los diferentes silicios
- Silicio monocristalino
Se consigue con un único cristal de silicio puro. Alcanza una eficiencia máxima que ronda entre un 18 % y un 20 %.
- Policristalino
En cambio, el Policristalino se obtiene a partir de varios cristales y se elabora en bloque. Por este motivo, resulta una opción mucho más económica. Su eficiencia ronda entre el 16 % y el 17,5 %.
- Amorfo
Se crea a partir de un conjunto desordenado de cristales, por lo que las prestaciones son considerablemente inferiores a las de los anteriores silicios. Sin embargo, el coste es menor. Su eficiencia es también significativamente inferior: del 8 % al 9 %.
Por último, cabe señalar la existencia de las plantas fotovoltaicas, dependiendo de su uso. La hay de dos tipos: Central fotovoltaica y generador de autoconsumo.
En la Central fotovoltaica la energía producida (en su totalidad) a través de paneles, se dispersa por la red eléctrica.
En cambio, en el generador de autoconsumo, una parte de la energía absorbida es usada por el propio productor (en una casa, por ejemplo) y el resto se envía a la red eléctrica.